viernes, 4 de abril de 2008

No me hagas reír...

Cuando estamos en esa búsqueda de la persona ideal, nos damos cuenta que el consejo de nuestras amigas cercanas es que sea un hombre con buen humor, que le guste reírse y conversar... Hay que estar claros. El señor Betancourt no tiene nada de eso, incluso es serio y mal humorado con frecuencia. Es feliz así. Pero a mi que me encanta andar con el "dientero pelado" todo el día como él mismo dice, me encanta que me hagan reír. Es raro que exista alguien bastante ocurrente como yo...

Es impresionante y hasta da un poco de miedo cuando alguien ajeno a ti, a tu entorno, y que no es precisamente tu esposo te puede hacer reír tanto, te hace olvidar los problemas, sin conocerte y sin querer indagar mucho te aconseja, te acompaña y está pendiente de ti, es decir, la continuación de mi post de que el diablo se viste de marca, en su versión simpática.

Este un post de cosas increíbles. Cómo el tiempo se reduce, los momentos pasan, la vida te mira de lejos y tú no te das cuenta... Cómo una persona sin atacarte directamente, sin decirte sus verdaderas intenciones, comienza a llegarte con detalles pero por debajito, en bajo perfil y sin declararse del todo, pero dejando la puerta abierta...

Me parece imposible que queden hombres en el mundo tan atentos al extremo, que todavía queden unos raros especímenes que no botan la baba por ti, sino que tratan de agradarte. Que no se quedan mirando tu trasero cuando te das vuelta, sino que te buscan para darte un abrazo "sincero". Y lo digo así entre comillas, porque al final, tiernos o no, todos buscan lo mismo.

Pues déjame decirte que así me encantas. Pero estoy segura que encontrarás una persona que te retribuya como yo no puedo hacerlo. Ya te he visto en algunas movidas de conquista, y si sigues con esos detalles no dudo que alguien se gane el premio de tenerte. Por mi parte, espero que no llegues a decepcionarme cayendo del peldaño del aprecio donde te coloqué. Y sé que tengo que ser muy fuerte, y seguir resistiendo las tentaciones que creo que tendré hasta mi despedida de soltera...